Para hacer tu casa inteligente y conectada, necesita un cerebro. La caja de domótica, encargada de servir como puente entre todos los dispositivos domóticos, interpretar sus comandos y datos para automatizar tu hogar según sea necesario, es el cerebro de tu vivienda. Cada una tiene sus especificidades para satisfacer todas las necesidades.
La box domótica no es la única manera de hacer inteligente una casa. También es posible utilizar una computadora en la que se haya instalado un software domótico y una interfaz domótica. Aquí también encontrarás módulos de extensión: algunas boxes pueden aumentar sus capacidades (agregando protocolos domóticos, módulos de comunicación GSM, batería de respaldo, etc.) simplemente agregándoles un módulo o una tarjeta de extensión.
Para facilitar la instalación del sistema domótico, muchos dispositivos funcionan de forma inalámbrica con el uso de baterías. Aunque la autonomía es cada vez mayor, es necesario reemplazarlas de vez en cuando. Aquí encontrarás los modelos más comúnmente utilizados.
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